En una sorpresiva decisión, la conga contra la homofobia que organiza anualmente el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), fue suspendida este lunes por indicación del gobierno cubano.
Un comunicado de la institución que dirige Mariela Castro señala que cumpliendo con las orientaciones del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), la tradicional Conga cubana contra la Homofobia y la Transfobia, no se realizará este año “por determinadas circunstancias que no ayudan a su desarrollo exitoso”.
“Las nuevas tensiones en el contexto internacional y regional afectan de manera directa e indirecta a nuestro país y tiene impactos tangibles e intangibles en el normal desenvolvimiento de nuestra vida cotidiana y en la implementación de las políticas del Estado cubano”, informó la nota, publicada en la página de Facebook del CENESEX.
La popular conga se ha desarrollado durante 12 ediciones como parte del programa de la Jornada Cubana contra la Homofobia, que organiza cada mayo la institución, perteneciente al MINSAP y rectora del Programa Nacional de Educación y Salud Sexual del país.
Según el comunicado, la medida no implica que la conga no pueda retomarse en próximos años.
La conga fue la verdadera génesis de estas jornadas, que comenzaron con una breve caminata de Mariela Castro Espín y un grupo de activistas por las calles de la barriada habanera del Vedado en 2007.
“La conga irrumpió como la actividad inicial de las primeras jornadas, y su realización ha devenido en toda una tradición, como el momento de mayor visibilidad de las personas LGBTI en Cuba”, escribió el periodista y activista del CENESEX, Francisco Rodríguez, conocido como “Paquito el de Cuba”.
“Me cuesta pensar que jueguen con nuestra inteligencia ¡Qué razones tan ingenuas!”, escribió Lidia Romero Moreno en el muro de Facebook de CENESEX. La forista sugirió que fueron los “fundamentalistas con su amenaza de marchar en contra de los derechos de las personas LGBTI” quienes inclinaron la balanza en la decisión de cancelar la conga.
Rodríguez, un cercano colaborador de Mariela Castro, dijo que la decisión “desborda al comité organizador” de las Jornadas contra la Homofobia y es un hecho “que ya no podemos remediar”.
“Tengo la tranquilidad de que nada ni nadie nos podrá regresar al closet, ni quiero ni puedo creer que alguien así lo pretenda”, agregó el periodista. “Estoy seguro de que este aparente traspiés circunstancial con la conga también nos permitirá extraer experiencias esenciales para futuras batallas”.
El anuncio se produce pocos días después de la entrada en vigor del Título III de la Ley Helms-Burton, de 1996, lo que ha agravado el ambiente de hostilidad entre La Habana y Washington. La legislación permite a los ciudadanos estadounidenses, incluidos los cubanoamericanos, demandar a compañías extranjeras que usan propiedades confiscadas por el régimen castrista.
La semana pasada, el presidente Donald Trump amenazó con imponer un “embargo total” contra Cuba por su continuo apoyo al gobierno de Venezuela y al presidente Nicolás Maduro.
